EL EQUILIBRIO PERFECTO

Hola a todos, queridos lectores:

Hoy quiero hacer una entrada recordando la necesidad de tener una vida sana, y cuáles son sus beneficios; especialmente ahora que estamos a las puertas de Semana Santa y, casi con total seguridad, cometeremos algún que otro exceso.

En primer lugar, y siguiendo a Delgado (1996), la idea no es otra más que:

LLENAR LA VIDA DE AÑOS, Y LLENAR LOS AÑOS DE VIDA.

Para ello es fundamental tener una alimentación sana, equilibrada y adecuada a nuestra edad y estilo de vida; además, es importante hacer ejercicio físico de manera regular, hidratarnos bien y tener un descanso óptimo.

Soy consciente de que llevamos un estilo de vida acelerado: trabajo, familia, responsabilidades en casa... pero eso no debe alejarnos de nuestro propio bienestar, puesto que solo tenemos un cuerpo, y creo que todos queremos vivir muchos años con él de la mejor manera posible. Así pues, recordemos algunas normas básicas:

• Hacer 5 comidas al día: desayuno, media mañana, almuerzo, media tarde y cena. dichas comidas deben respetar las normas básicas que vienen señaladas en la pirámide de la alimentación (adjunta a modo de enlace).
• Dormir, a ser posible, unas 7-8 horas al día. El sueño es el que nos regenera, nos carga las pilas, nos permite sentirnos bien y a tope.
• Hacer ejercicio de manera regular: 30 minutos al día, 1h al día 3-4 veces por semana... ya sea al aire libre, en el agua, en un gimnasio, en una sala de yoga o Pilates... pero hacer actividad física.
• Hidratarnos lo suficiente: la recomendación oscila en 1 litro y medio al día de agua. Aunque también aquí influye nuestra actividad física, trabajo, etc., lo ideal es no notar la boca seca, beber agua a lo largo de todo el día aún sin tener sensación de sed.

Si seguimos todas esas pautas, podremos comprobar cómo día a día nos sentimos mejor, estamos más contentos, nuestro cuerpo responde mejor a la rutina, rendimos mejor en el trabajo, en nuesra casa...y, en definitiva, todo fluye de manera más adecuada y natural.

Nueva pirámide de la alimentación

Ahora, deseándoos una muy feliz Semana Santa, me despido de vosotros hasta el mes que viene, esperando que os cuidéis mucho y que busquéis vuestro bienestar, para así poder disfrutar de vuestra vida al máximo.

Muchísimas gracias por vuestro tiempo y... ¡¡¡hasta pronto!!!